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30 de Diciembre, 2008
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General |
CARLOS "CHULO" DOMÉNICO: cantante y docente |
Carlos Alberto Doménico nació el 28 de noviembre de 1954 en Balcarce. Hijo único de Dora Doménico, fue a la escuela nro. 4 donde tuvo su primera experiencia con la música. Luego de tres años en el Colegio Industrial, abandonó la escuela para, unos años después, terminar el secundario en la primera promoción del turno noche en el Colegio Nacional.
Su primer contacto con una guitarra fue a los 15 años cuando ganó unos pesos trabajando en la escenografía del Festival del Canto Argentino.
Con la guitarra en la mano decidió estudiar con el maestro Webb.
Al poco tiempo trabajaba con Cristóbal Cano en la fabricación de sillas de mimbre. Años después lo haría en Mar del PLata con muebles de caña.
Al principio de los setenta debutó como ayudante del grupo Brasanegra y, por su constancia, le dieron a tocar la batería. Al mismo tiempo, era uno de los integrantes de la banda de música de los bomberos voluntarios de Balcarce.
Luego de un breve tiempo en el grupo Burbujas se incorpora a Manteka.
En 1984 se casa con Carmen Penna con quien tiene una hija: Dorana.
Maestro de Música, artesano y músico, Carlos tiene un sueño: tocar en Cosquín.
Entrevista: César G. De GerónimoFotos: Diego ColaneriCarlos nos cuenta, al empezar la entrevista, una anécdota de los tiempos de la escuela primaria:Íbamos con Rolando Tapia a tercer grado, en la vieja escuela número 4. Nos ponían en penitencia y para perdonarnos nos pedía la maestra, Coca Larripa, que le cantáramos “Vestida de Novia” de Palito Ortega, entonces nos hacía volver al salón, está bien, vayan nos decía. Era la querida Escuela 4 en el edificio anterior a éste, a la cual le compuse un tema. Yo estuve entre los privilegiados que transportamos las cosas al nuevo edificio y con el tiempo vengo a ser docente de música allí. ¿Cómo llegaste a la música?Mi vida pasaba por el fútbol pero un día nos contrataron junto a unos amigos para armar la escenografía de uno de los festivales del canto. Esa fue la experiencia que me acercó al mundo de la música, veía los ensayos y escuchaba a los músicos y para mí era algo impresionante. Así que con ese dinero compré la primera guitarra que todavía conservo. Después con el tiempo comencé a estudiar aunque más aprendía de mis amigos que ya tocaban. La primera incursión fue en el grupo Brasanegra, que los que tienen más de cincuenta se deben acordar, seguramente. Antes de Brasanegra tuviste experiencia en artesanía. Sí. La música siempre fue el segundo trabajo. Recién ahora es un placer y gusto y en su momento además trabajo. Eran todos los sábados y domingo a pleno con los bailes. En cuanto a la artesanía, cuando tuve que abandonar el colegio fui a trabajar con Cano haciendo las sillas de mimbre con quien estuve diez años. Luego trabajé para una gente de Mar del Plara en muebles de caña. En ese período terminé el secundario nocturno en el Colegio Nacional. Tiempo después llegué a la Escuela de Arte...¿Cómo fuiste a dar a la Escuela de Arte?Me encontré un día con mi amigo Pepe Peti que se iba a inscribir y yo lo acompañé. De paso me anoté yo también. Nos preguntaron si queríamos estudiar Magisterio o Básico. Así que descubrí lo que inconscientemente quería, enseñar música. Así que a los tres años ya estaba haciendo suplencias y desde ese momento no he parado, Escuela 4, escuela 16, y muchas más.Me contabas antes sobre tu paso por Brasanegra...Llegó un momento en que el grupo se separa en dos: Burbujas y Manteka. Yo me fui con Grigera, Peti y López a Burbujas. Cuando el baterista de Manteka, Antonio Procopio, se fue a Santiago del Estero, entré a Manteka. Fue una época maravillosa porque teníamos actuaciones en todos lados, incluida la costa, Necochea, Mar del Plata, Pinamar, Villa Gesell, era sorprendente la popularidad que teníamos en otras localidades de la zona, además de la que ya teníamos en Balcarce. Amenizábamos los bailes y fuimos los mediadores de muchos matrimonios, que algunos nos estarán agradeciendo y otros nos estarán odiando. Luego de seis o siete años de haber dejado de tocar decidimos volver a juntarnos para hace una o dos presentaciones en el Teatro. Pensábamos tocar música no sólo bailable sino también para escuchar, era un poco riesgoso. Así que pensamos en una institución para darle el beneficio de las entradas, el Taller Protegido. Luego de haber vendido todas las entradas el presidente nos confesó que tenía algunas dudas sobre el éxito del recital. Ni pensaban que se iba a dar el éxito que se dio. Cuando estábamos en el camarín viene mi hija y nos dice: “la cola da la vuelta a la esquina”, no lo podíamos creer. La segunda vez que hicimos eso, como a los cuatro años, fue mayor la afluencia de público, mucha gente se aguantó las dos horas de recital parada a un costado.  La música ha sido una constante en tu vida...Si, hace doce años que Manteka terminó y sin embargo me armé un pequeño estudio de grabación, vienen amigos a tocar y este es mi mundo, donde pasan cosas diferentes de aquella época. En ese entonces grabar un disco constaba una fortuna y ahora con la computadora y un micrófono es mucho más fácil. ¿Cómo es la relación con los chicos en la docencia?Me da la posibilidad de acercarle la magia de la música. Sin negarle sus gustos pero agregando, despacito, las otras posibilidades. Desgraciadamente el bombardeo de la televisión con los intereses comerciales de por medio a veces tira en contra pero es un desafío.Contáme algo de tu experiencia con la armónica.Tenía una armónica barata para mostrarle a los chicos. En un momento me pidieron que tocara algo y me dio vergüenza porque no sabía tocarla. Ya había intentado pero no me salía nada y me había dado por vencido. Así que para satisfacer a mis alumnos me dediqué con paciencia a aprender y puedo decir, después de haber tocado en la banda de los bomberos, la batería, la guitarra y otros instrumentos, que con la armónica he podido expresarme al cien por cien, además del reconocimiento que he logrado que no lo logré con los otros instrumentos. Carlos nos despide con “Alfonsina y el Mar” ejecutada en la armónica y en su expresión se nota toda la fuerza, como si el instrumento fuera parte ya no sólo de su cuerpo, sino de su alma.
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publicado por
dippy a las 19:20 · Sin comentarios
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SOBRE MÍ |
César Gustavo De Gerónimo
Soy egresado del Colegio Nacional de Balcarce, gloriosa promoción 1975. He sido empleado bancario, soy fotógrafo, ahora conductor de este programa y vaya a saber qué otra cosa en el futuro. Estoy cursando Formación Básica de Música en la Escuela de Arte de Balcarce, instrumento: guitarra. Tengo una familia desde el año 1982: la misma compañera y tres hijos.
Y muchos sueños...
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BIENVENIDO |
El presente blog refleja la síntesis de las entrevistas televisivas del programa Vida de Artista. El mismo se difunde por Canal 2 de Cablevisión Balcarce.
Hacemos este progama en el convencimiento de que los reconocimientos se hacen en vida y sirven como ejemplo a otras personas. Tratamos de mostrar no sólo la calidad artística sino el esfuerzo y la constancia en una actividad que no tiene al dinero y la fama como móvil y objetivo.
Si está interesado en obtener una copia de la entrevista en DVD haga click en contacto o envíe un correo a dippyfotos@gmail.com.
Que lo disfrute.
César Gustavo De Gerónimo - Conductor
Diego Colaneri - Director Técnico |
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